Papel y Tinta
@JulzyaIsaidit
Pablo Camberos
“Pero aquel que desee alcanzar la primavera sin pasar por el invierno, jamás lo logrará” Gibran Khalil Gibran Rahme
La llegada de la primavera trae consigo renovadas fuerzas y es el momento perfecto para conectar con nueva energía y no olvidar de dónde venimos. Hace miles de años, nuestros ancestros y las culturas místicas, celebraban el equinoccio de primavera como un portal de oportunidades para guiar nuestro espíritu hacia la luz.
La llegada de la floración, también trae consigo, la creación e inspiración en los artistas. De la primavera y su relación con el amor hemos cosechado sus frutos a través de las historias de grandes personajes de todas las disciplinas: escritores, pintores, cineastas y músicos como Byron, Frida Kahlo, Salgari, Marilyn Monroe, Sid Vicious, Tchaikovski, Freud, James Joyce, Borroughs, Artemisia Gentileschi, entre muchos otros. Todos con testimonios apasionantes.
Cada amor y cada primavera son únicos para cada persona. Otra cosa es que confundamos el amor con lo que no lo es. Y creo que eso es lo que sucede con las redes sociales que nos mantienen en un estado de permanente espejismo: ni estamos tan acompañados, ni la gente es tan feliz, ni es amor todo lo que se muestra a través de ellas. Que en vez de escribirnos cartas nos escribamos por WhatsApp.
Estimados lectores de Papel y Tinta, es el momento perfecto y más significativo para introducirnos a nuestro lado espiritual. Al igual que la tierra pasa por diferentes estaciones y ciclos, nosotros también pasamos por varias etapas de desarrollo y evolución. Es revivir la fuerza activa que ha estado dormida en invierno. Florecer, renacer, plantearnos nuevas metas y sueños.
Hay que valorar, hoy más que nunca ser libre y tener acceso a tierras inexploradas, a disfrutar el agua de los ríos, a subir una montaña, a escuchar los susurros del bosque y estar rodeados del arte de contemplar.
Les deseo un periodo de reconexión, de ver hacia su interior y darle prioridad a lo espiritual, a perdonar, a valorar y agradecer lo que es, lo que fue y lo que será. Todos y cada uno de nosotros encontraremos en la primavera, una nueva oportunidad.
Y me despido con una estrofa del sencillo So Sad que escribió George Harrison "Toma el amanecer del día y obséquialo a alguien que puede llenar la parte del sueño que una vez tuvimos”.
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